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Residuos

Los residuos de construcción y demolición (RCD) son uno de los flujos de residuos más pesados y voluminosos generados en la UE. Representa aproximadamente el 25 % – 30 % de todos los residuos generados en la UE y consta de numerosos materiales, incluidos hormigón, ladrillos, yeso, madera, vidrio, metales, plástico, disolventes, amianto y suelo excavado, muchos de los cuales se pueden reciclar.

Los RCD nacen de actividades como la construcción de edificios e infraestructura civil, la demolición total o parcial de edificios e infraestructura civil, la planificación y el mantenimiento de carreteras. Se aplican diferentes definiciones en toda la UE, lo que hace que las comparaciones entre países sean engorrosas. En algunos países, incluso los materiales procedentes de la nivelación de la tierra se consideran residuos de construcción y demolición.

La Unión Europea ha identificado los RCD como un flujo prioritario de residuos. Existe un alto potencial para el reciclaje y la reutilización de RCD, ya que algunos de sus componentes tienen un alto valor de recursos. En particular, existe un mercado de reutilización de áridos derivados de residuos RCD en carreteras, drenaje y otros proyectos de construcción. La tecnología para la separación y recuperación de los residuos de construcción y demolición está bien establecida, es fácilmente accesible y, en general, es económica.

Dentro del flujo de residuos de RCD más importante, podemos diferenciarlos en Residuos No Peligrosos (RNP) y Residuos Peligrosos (RP)

  1. RESIDUOS PELIGROSOS

La existencia de sustancias peligrosas o potencialmente peligrosas no siempre obliga a su retirada inmediata, ni a realizar una descontaminación.

Algunas de estas sustancias pueden seguir empleándose con normalidad o mantenerse para su fin original, siempre y cuando estén debidamente identificadas y no supongan un riesgo para la salud o el medio ambiente. Cuando estas sustancias lleguen al final de su vida útil, o cuando su estado o peligrosidad supongan un riesgo, se convertirán en un residuo peligroso y deberán ser retiradas.

De forma general, será necesario realizar una descontaminación cuando el tipo de residuo peligroso al que nos enfrentamos requiera su retirada, y ésta deba hacerse mediante un proceso especial de aislamiento, retirada y acondicionamiento, para que no suponga un riesgo para la salud o el medio ambiente.

Según el anexo III de la mencionada ley 22/2011 de residuos y suelos contaminados, se considerará que un residuo es peligroso cuando presente al menos una de las siguientes características:

  • H1 Explosivo: se aplica a las sustancias y preparados que pueden explosionar bajo el efecto de la llama o que son más sensibles a los choques o las fricciones que el dinitrobenceno.

  • H2 Oxidante: se aplica a las sustancias y preparados que presentan reacciones altamente exotérmicas al entrar en contacto con otras sustancias, en particular sustancias inflamables.

  • H3-A Fácilmente inflamable: se aplica a:

Las sustancias y los preparados líquidos que tienen un punto de inflamación inferior a 21 ºC (incluidos los líquidos extremadamente inflamables).

Las sustancias y los preparados que pueden calentarse y finalmente inflamarse en contacto con el aire a temperatura ambiente sin aporte de energía.

Las sustancias y los preparados sólidos que pueden inflamarse fácilmente tras un breve contacto con una fuente de ignición y que continúan ardiendo o consumiéndose después del alejamiento de la fuente de ignición.

Las sustancias y los preparados gaseosos que son inflamables en el aire a presión normal.

Las sustancias y los preparados que, en contacto con el agua o el aire húmedo, desprenden gases fácilmente inflamables en cantidades peligrosas.

  • H3-B Inflamable: se aplica a las sustancias y los preparados líquidos que tienen un punto de inflamación superior o igual a 21 ºC e inferior o igual a 55 ºC.

  • H4 Irritante: se aplica a las sustancias y los preparados no corrosivos que pueden causar una reacción inflamatoria por contacto inmediato, prolongado o repetido con la piel o las mucosas.

  • H5 Nocivo: se aplica a las sustancias y los preparados que por inhalación, ingestión o penetración cutánea pueden entrañar riesgos de gravedad limitada para la salud.

  • H6 Tóxico: se aplica a las sustancias y los preparados (incluidos las sustancias y los preparados muy tóxicos) que por inhalación, ingestión o penetración cutánea pueden entrañar riesgos graves, agudos o crónicos e incluso la muerte.

  • H7 Cancerígeno: se aplica a las sustancias y los preparados que por inhalación, ingestión o penetración cutánea pueden producir cáncer o aumentar su frecuencia.

  • H8 Corrosivo: se aplica a las sustancias y los preparados que pueden destruir tejidos vivos al entrar en contacto con ellos.

  • H 9 Infeccioso: se aplica a las sustancias y los preparados que contienen microorganismos viables, o sus toxinas, de los que se sabe o existen razones fundadas para creer que causan enfermedades en el ser humano o en otros organismos vivos.
  • H 10 Tóxico para la reproducción: se aplica a las sustancias y los preparados que por inhalación, ingestión o penetración cutánea pueden producir malformaciones congénitas no hereditarias o aumentar su frecuencia.
  • H 11 Mutagénico: se aplica a las sustancias y los preparados que por inhalación, ingestión o penetración cutánea pueden producir defectos genéticos hereditarios o aumentar su frecuencia.
  • H 12 Residuos que emiten gases tóxicos al entrar en contacto con el aire, con el agua o con un ácido.
  • H 13 (*) Sensibilizante: se aplica a las sustancias y los preparados que, por inhalación o penetración cutánea, pueden ocasionar una reacción de hipersensibilización, de forma que una exposición posterior a esa sustancia o preparado dé lugar a efectos nocivos característicos.
  • H 14 Ecotóxico: se aplica a los residuos que presentan o pueden presentar riesgos inmediatos o diferidos para uno o más compartimentos del medio ambiente.
  • H 15 Residuos susceptibles, después de su eliminación, de dar lugar a otra sustancia por un medio cualquiera, por ejemplo, un lixiviado que posee alguna de las características antes enumeradas.

En nuestro entorno, podemos encontrar residuos peligrosos con facilidad.

Algunos de los más habituales son:

Productos químicos inorgánicos

  • Amianto
  • PCB y aparatos contaminados con PCB (trafos)
  • Fluorescentes
  • Hidrocarburos y aceites usados
  • Pinturas y disolventes
  • Trapos impregnados
  • Pilas y baterías
  • Imprimaciones y sellantes
  • Residuos radiactivos
  • Material informático

  1. AMIANTO – ASBESTO

FOTO AMIANTO ASBESTO

El amianto o asbesto es un mineral natural compuesto por muchas fibras pequeñas. Hay tres tipos principales:

  • Amianto azul – crocidolita
  • Amianto marrón – amosita
  • Amianto blanco – crisotilo

¿Cuáles son los riesgos?

El amianto puede ser perjudicial si se inhala el polvo que contiene la fibra.

El riesgo de amianto cuando las fibras siguen intactas (como en el cemento de amianto) se reduce significativamente. Sin embargo, trate siempre todos los productos de amianto con precaución como fuentes potenciales de polvo fibroso y manéjalos con cuidado.

¿Dónde se encuentra?

El amianto se ha utilizado sobre el hogar en materiales de construcción y bienes de consumo, particularmente para resistir el calor y dar protección contra incendios.

Los usos comunes en el pasado son los:

Aislamiento en edificios y fábricas, en tuberías y para calderas y conductos

Tablero aislante de amianto, que se utilizaron como tabiques de pared, puertas cortafuegos, plafones, etc.

Productos de cemento de amianto como láminas en paredes y techos, tejas, tanques de agua fría, canalones, tuberías y acabados decorativos de yeso

Un recubrimiento en aerosol en trabajos de acero, paredes y techos de hormigón, para protección contra incendios y aislamiento

El material de amianto puede ser perturbado inadvertidamente durante los trabajos de mantenimiento, reparación o renovación en la construcción. La perforación, el corte u otras perturbaciones de los materiales de amianto existentes pueden liberar fibras de amianto en el aire. Los productos de amianto siempre deben manipularse con cuidado.

Qué hacer

Si crees que has encontrado amianto en tu propiedad y no estás seguro de si el material contiene amianto, no te arriesgues. Consulta a los técnicos de TRANDEX, S.A. de DEMOLICIONES.

  1. SUELOS CONTAMINADOS

FOTO BIOPILAS

¿Cuáles son las tendencias de las tierras contaminadas y sus efectos en la salud humana y el medio ambiente?

La contaminación de la tierra puede ser el resultado de una variedad de actividades y eventos previstos, accidentales o naturales, como la fabricación, la extracción de minerales, el abandono de minas, las actividades de defensa nacional, la eliminación de desechos, derrames accidentales, vertederos subterráneos, huracanes, inundaciones, uso de pesticidas y aplicación de fertilizantes.

A nivel nacional, hay miles de sitios contaminados de diferente tamaño y significado en entornos que van desde edificios abandonados en ciudades interiores hasta grandes áreas contaminadas con materiales tóxicos de actividades industriales o mineras anteriores.

Las tierras contaminadas incluyen:

•Sitios contaminados por manipulación o eliminación inadecuadas de materiales y desechos tóxicos y peligrosos.

•Sitios donde materiales tóxicos pueden haber sido depositados como resultado de desastres naturales o actos de terror.

•Sitios donde la manipulación inadecuada o accidentes resultaron en la liberación de materiales tóxicos o peligrosos que no son desechos.

En TRANDEX, S.A. de DEMOLICIONES El objetivo final de estas obras es la descontaminación de los suelos presentes en diferentes partes, mediante el sistema conocido como BIOPILAS. Se trata de un proceso biológico controlado donde los contaminantes orgánicos son biodegradados y mineralizados, mediante un proceso que consiste en la formación de pilas con el suelo contaminado y estimulación de la actividad microbiana, mediante aireación y/o adición de nutrientes y humedad.

RECOGIDA DE LIXIVIADOS: La función del sistema, como su nombre indica, es la de recoger los líquidos que puedan generarse como consecuencia de la actividad bacteriana en el interior de la “Biopila” (fundamentalmente agua) o los lixiviados correspondientes a las fases libres de los combustibles causantes de la afección de los suelos (fueloil, aceite mineral y diesel).

  1. RAEE (Residuo Aparatos Eléctricos y Electrónicos), QUIMICOS E INDUSTRIALES

FOTO de estos RP

El origen y los flujos de este tipo de residuos peligrosos pueden ser muy diversos. A esta diversidad, hay que añadir que la gestión de los residuos peligrosos está también vinculada, en muchos casos, a la normativa laboral y de prevención de riesgos.

Y en el caso de algunos sectores (por ejemplo, en construcción), es de aplicación también la normativa específica para la gestión de residuos.

Por todo ello, desde TRANDEX, S.A. de DEMOLICIONES se propone seguir un procedimiento estandarizado para la búsqueda y caracterización de residuos peligrosos, como etapa previa a otras labores: mantenimiento, rehabilitación, fin de la actividad industrial, demolición,…

Este procedimiento ha de servir para buscar residuos peligrosos, y en caso de encontrarlos, identificar y cuantificar las sustancias presentes en la construcción (edificación o estructura) o en el soporte que corresponda (barcos, trenes,…).

La necesidad de este procedimiento de búsqueda y caracterización ya está recogida en la normativa vigente para varios tipos de residuos peligrosos, pero no está unificada ni se ha especificado claramente quién debe hacerla, ni los pasos a seguir.

Por motivos lógicos, debería ser una entidad independiente (al edificio, industria,… y también que no sea la misma que realiza la descontaminación) quien realice la labor de investigación, identificación y cuantificación de los residuos peligrosos.

El resultado de esta labor servirá para obtener un inventario (por ejemplo, para tomar las medidas oportunas en el plan de prevención de riesgos) o bien para proceder posteriormente a las tareas oportunas de descontaminación.

Este procedimiento previo se denominaría proyecto IIC-RP, en alusión a las etapas de investigación, identificación y cuantificación de residuo(s) peligroso(s) que se realizan en el mismo.

Un aspecto fundamental para el adecuado manejo de un residuo peligroso es su identificación, ya que la naturaleza y características de peligrosidad inherentes a él determinarán las acciones y precauciones oportunas en cada caso para su manipulación.

Para poder identificar los residuos peligrosos, puede ser necesario tomar muestras de los mismos, mediante los mecanismos más adecuados a cada tipo de residuo (mediciones ambientales, recogida de fragmentos,…), tomando para ello las precauciones oportunas.

Las muestras se enviarán a un laboratorio acreditado, que nos dará los resultados de la analítica para añadirlos al informe de la investigación.

Dependiendo del sector, será preciso codificar los residuos encontrados según la Lista Europea de Residuos (LER) o según el Código Internacional de Identificación de Residuos (CIIR).

En cualquier caso, todos los resultados obtenidos durante el proceso de identificación de residuos peligrosos (tanto positivos como negativos) deben adjuntarse al proyecto, en el que posteriormente se basará cualquier acción a realizar.

Es preciso elaborar un informe en el que se cuantifican los residuos peligrosos detectados,

en el que se incluyan al menos los siguientes datos:

  • Cantidad: expresada en volumen, superficie o peso, según sea el caso

  • Ubicación: indicada en un plano o alzado, para que sean fácilmente localizables

  • Tipo: naturaleza y código de identificación de los residuos

  • Estado: indicando cómo se encuentran y si requieren algún condicionante especial para su gestión adecuada

En algunos sectores puede ser necesario indicar también otros datos, como:

  • Productor: identificación de la persona o entidad titular
  • Origen de los residuos: como parte de un proceso de producción, por mezcla con otros residuos,…

Acciones previas: fecha y descripción de los tratamientos realizados, si es el caso (por ejemplo, aislamientos ambientales en caso de riesgo para la salud pública, irrigación de sellantes para evitar dispersión de fibras,…)

El inventario de residuos peligrosos puede realizarse como paso previo a la transformación de un edificio o estructura (por ejemplo, para realizar una rehabilitación, demolición o desguace), o bien para tener conocimiento del estado y características de los mismos.

Algunos inventarios pueden ser solicitados por requisitos legales (por ejemplo, en caso de ruinas industriales, suelos contaminados,…), y otros se realizan porque el edificio o estructura continúa en uso, y se desean incorporar las sustancias peligrosas al plan de prevención de riesgos laborales.

El inventario nos permite saber dónde y cómo están las sustancias peligrosas, conocer los riesgos que entrañan y, en caso de necesitar realizar algún tipo de modificación, tener la información pertinente.

En cualquier caso, el inventario debe ser actualizado periódicamente para que pueda considerarse como fiable.

La realización de un procedimiento de investigación, identificación y cuantificación de peligrosos nos permite obtener un inventario detallado, que puede complementarse con datos como medidas preventivas para la salud de las personas, o para la contención de las sustancias peligrosas.

  1. RESIDUOS NO PELIGROSOS

En la siguiente tabla identificamos los RNP más habituales que se identifican en gran parte de las demoliciones ejecutadas en todo el territorio nacional:

Tipos de Residuos Código L.E.R.
RCD Nivel I
Tierra y pétreos de la excavación 17 05 04
RCD Nivel II
RCD Nivel II: Naturaleza Pétrea
Arena, grava y otros áridos 01 04 08
Residuos de corte y serrado de piedra 01 04 09
Hormigón 17 01 01
Ladrillos 17 01 02
Tejas y materiales cerámicos 17 01 03
Mezcla de hormigón, ladrillos, tejas y materiales cerámicos 17 01 07
Residuos mezclados de construcción y demolición 17 09 04
RCD Nivel II: Naturaleza No Pétrea
Madera 17 02 01
Metales (incluidas sus aleaciones) 17 04 (03 05 07 11)
Materiales aislantes 17 06 04
Plástico 17 02 03
Vidrio 17 02 02
Papel y cartón 20 01 01

No obstante se puede descargar un listado actualizado de los códigos LER en el siguiente enlace.

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